La articulación que se realiza entre el cráneo y la mandíbula, es una articulación muy especial y una de las más delicadas de nuestro cuerpo, y tiene una relacion con la columna cervical por medio del hueso hioides. Este conjunto pertenece a la unidad funcional I de como se divide el cuerpo.
El cuerpo humano se divide en 3 unidades funcionales:
• La unidad funcional I incluye el cráneo, la mandíbula y las 2 primeras vertebras atlas y axis, únicas vertebras que no tiene discos entre ellas, están relacionadas con el cráneo mediante músculos.
• La unidad funcional II, la forman la columna cervical baja, esternón, clavícula y miebros superiores. Se denomina también cintura escapular.
El hueso hioides hace una zona de pasaje entre estas dos unidades funcionales.
• La unidad funcional III, denominada también cinturón pélvico, incluye las vértebras lumbares, sacro y miembros inferiores.
Éstos elementos están unidos, en forma funcional, si se mueve la mandíbula se alteran las vertebras cervicales y por intermedio de éstas el hueso hioides, pudiendo llegar a elevar un hombro, por eso el paciente puede presentar un hombro más alto que otro.
Estas 3 unidades deben mantenerse en equilibrio para una postura en equilibrio, cuando se afectan, principalmente la unidad funcional I, la mandíbula cambia su posición. Esta alteración se debe en parte a que la mandíbula tiene gran movilidad, se mueve aproximadamente 2000 veces en el día, para diferentes funciones como son: deglutir, respira, hablar, etc. También es una articulación en donde convergen varios nervios y que se encuentra en relación a órganos vecinos como es el oído y el sistema del equilibrio.
Una de las causas de este desequilibrio mandibular son varios. Entre ellos los traumatismos, muelas altas, bruxismo, mal oclusiones, entre otros.
La mandíbula es un hueso con una articulación doble, por lo tanto, al abrir la boca, abre al mismo tiempo. Los cóndilos de la mandíbula articulan en la cavidad glenoidea ubicada en el hueso temporal y entre estas dos superficies se ubica un disco articular que permite realizar este movimiento al mismo tiempo.
Al existir algo que lo altere como golpes, muelas restauradas altas, etc. Ese menisco se moviliza provocando que la mandíbula cambie la forma de cerrar, se lateralice y dolor al abrir y cerrar, ruidos articulares. Y si no se soluciona a tiempo pueden iniciar síntomas como cefalea, vértigo, Tinnitus, oído tapado, neuralgia del trigémino. ¿Pero anatómicamente pasa esto? porque el nervio aurículo temporal inerva la articulación de la mandíbula, cuando la articulación de la mandíbula se posiciona en la parte más posterior ocasiona dolor local, dolor de cara, síntomas oticos, como pueden ser un dolor de oídos, también hay que recordar que mantiene una relación estrecha con la trompa de Eustaquio, originando tapamiento de oídos. Tiene relación estrecha con el martillo, mediante el ligamento discomaleolar ocasionado zumbido. Si usted tiene algunos de estos síntomas o siente que su mordida no es igual a lo mismo que si cuando abre y cierra la boca escucha un ruido en la articulación de la mandíbula, por favor consulte, ya que estas patologías atendidas a tiempo son curables.